Menú Cerrar

Las Fresas y sus Beneficios

Con la llegada de la primavera empezamos a disfrutar del sabor dulce y aromático de las primeras fresas de la temporada. La fresa presenta importantes propiedades diuréticas y depurativas: favorece la eliminación del ácido úrico y sus sales y «arrastra» hasta eliminar de nuestro organismo las sustancias nocivas que vamos acumulando, como los ácidos biliares, el colesterol y las toxinas. Por todas estas propiedades, es importante introducir la fresa en la dieta de aquellas personas que presenten altos niveles de ácido úrico en sangre, que sufran de gota, hipertensión arterial, retención de líquidos, artritis y otros reumatismos.

fresas

Fresas, ricas en vitaminas, fibra y minerales

Junto a la acción depurativa y diurética, otra de las características más importantes de la fresa es su alto contenido en vitamina C: basta consumir 100 gramos de fresa para cubrir todas las necesidades diarias de esta vitamina. Además, es rica en minerales como el ácido fólico, el hierro, el calcio y el potasio. De ahí que se considere a la fresa como un alimento remineralizante muy adecuado en estados carenciales, en déficits nutricionales o durante el embarazo y la lactancia. A todo ello hay que añadir una ventaja más: dado su bajo aporte calórico (31 calorías por 100 gramos) puede incluirse en cualquier tipo de dieta, incluso en personas que sigan una dieta de adelgazamiento, ya que su aporte energético es mínimo y su contenido en fibra proporciona sensación de saciedad. Su fibra es soluble, con lo que facilita la menor absorción de carbohidratos y ayuda a mantener equilibrados los niveles de azúcar en la sangre. Por este motivo, muchas mujeres que la consumen con asiduidad, aseguran que su ingesta les brinda tranquilidad, reducción del estrés y menos dolor durante sus ciclos menstruales o durante la menopausia.

Pese a todos sus múltiples beneficios, es necesario destacar que no debe abusarse de la fresa si se tienen piedras en el riñón o se sufre de colitis o colon irritable. También se conoce que la fresa puede producir reacciones alérgicas en algunas personas y, por su contenido en histamina, puede desencadenar migrañas en gente propensa a ellas.

La fresa puede consumirse sola, con azucar, con miel, con nata, con leche condensada, en macedonia, en batido o como cobertura de una tarta. Cualquier forma es buena, aunque habrá que prestar atención al aporte calórico de sus «acompañantes» en caso de estar haciendo dieta o sufrir de sobrepeso.

Fuente: «100 alimentos que mejoran tu salud». RBA. 2010.
Imagen: trendenciasbelleza.com

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.