Menú Cerrar

Hábitos Saludables para Volar en Avión

Artículo escrito por Mónica de Facturación y Embarque.

Cuando volamos en avión, ya sean de duración corta o larga, hay unas pautas que podemos seguir para hacer de esta experiencia un hábito más saludable.

Niño en avion
Niño en avión (por Pierre LaScott)

Vamos a separar los hábitos en vuelos de corto y medio-largo radio.

Para vuelos de corto radio, la altitud y los cambios de presión que sufre nuestro cuerpo son de menor impacto al ser el vuelo de corta duración.

No obstante, es recomendable para evitar el entumecimiento de piernas, hacer pequeños ejercicios de rotación de los pies y en la medida de lo posible, también podemos levantarnos de nuestro asiento y caminar.

Comer saludable y ligero y beber líquido, nos mantendrá suficientemente hidratados durante el transcurso del vuelo.

En los vuelos de largo radio, nuestro ritmo biológico se verá afectado, puesto que habrá probablemente un cambio de huso horario. Este efecto, conocido como jet lag (de acuerdo al diccionario de términos aeronáuticos), se agudiza más cuando volamos por ejemplo del Oeste a Este en un vuelo diurno.

Algunos consejos fundamentales que harán que nuestro organismo se sienta mejor son:

  • Adaptarnos al nuevo horario unos días antes (irnos a dormir más temprano para vuelos al Oeste o más tarde para vuelos al Este).
  • Estar descansado y tranquilo el día de coger el avión ( esto significa haber dormido bien la noche antes).
  • Comer de forma ligera (fruta y verdura preferentemente) en el avión y evitar el alcohol y bebidas con gas.
  • Beber mucho líquido.
  • Adaptarnos al nuevo horario incluso dentro del avión y por supuesto nada más aterrizar, alargar la adaptación, solo perjudicará a nuestro organismo. Se aconseja poner el reloj en la hora de destino, nada más despegar y por tanto empezar ya este proceso de adaptación al nuevo huso horario.
  • Practicar ejercicios de rotación de los pies y permanecer de pie durante algunos minutos, beneficiará a nuestro sistema circulatorio. El conocido como “síndrome de la clase turista” no debe asustarnos, ya que los pocos casos que se han dado, han sido en personas con problemas agudos de carácter circulatorio y en cualquier caso minimizaremos el riesgo siguiendo estas pautas.

Por último si queremos completar el descanso durante el vuelo, es conveniente usar tapones que nos aíslen del ruido y un antifaz, ya que las luces de cabina no se atenúan completamente. Generalmente incluso en clase turista, la mayoría de compañías aéreas facilitan estos accesorios junto con manta y almohada.

Estos consejos escritos para adultos, pero también son aplicables para volar con niños: debemos mantenerlos especialmente hidratados (incluida su piel) y procurarles el vuelo lo más agradable posible, con sus juguetes o muñecos habituales, esto ayudará a que ellos también se sientan más tranquilos (recordemos que están en un entorno desconocido).

Artículo escrito por Mónica de Facturación y Embarque.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.